jueves, 15 de julio de 2021

180 CHOCAMOS CON ALGO SUMERGIDO

 Por la islas Cícladas. Salíamos de Batsi, un pequeño puerto en la isla de Andrios y teníamos 28 millas por delante con un meltemi flojo , por la aleta y aumentando según íbamos ganando millas.  Nos faltaban unas cinco millas para llegar al puerto de Tinos, de la isla con el mismo nombre. Íbamos  con el foque y a bastante velocidad, unos 8 nudos y puntas de 9 por el traves y aleta, cuando sentí un fuerte golpe en el barco y mucha presión en el timón, pero iba respondiendo. Seguimos y a una milla del puerto, decido enrollar el genova, fuerza ocho en ese momento, supongo que el cabo del balumero se debio de enganchar y rompio mas de la mitad de la valuma. Al entrar en la ensenada del puerto, paro el barco para preparar maniobra de atraque y noto que el timón deja de hacer menos presión, pensamos que algo que se engancho y se solto en ese momento. Pero el timón tenia una fuerte tendencia de irse a estribor. 

Una vez atracado, me fije que la parte baja del timon y vi que tenia unos mallazos. Por lo tanto con algo golpeamos.  A la media hora, se nos acerco un señor bastante mayor y señalando los girones de la vela, dijo que el me la arreglaba. Arriamos y se la llevo, al dia siguiente por la mañana nos la entrego y me cobro 70€, contento me quedé. 

Salimos del puerto hacia la isla de Delos, para que mis amigos menorquines, visitasen las ruinas. Yo me quede a bordo para bucear y chequear. Mi sorpresa fue ver en la parte baja del bulbo de la orza, que tenía unos buenos rascazos, pero mayor fue la sorpresa al ver que la cara de babor del timón, había desaparecido. Avisé al varadero del problema y directos allí nos dirigimos, 121 millas llevando por turnos el timón ya que el automático no era capaz de llevarlo. Me subieron el barco y ya desmontaron el timón, para lavar y secar. Los dos días sucesivos fueron para repararlo, muy robusto y buen trabajo. Al cuarto día volvíamos a dormir otra vez en las Ciclades.  

Ya en el agua y con un timón suave, hicimos la travesía a Kithnos, con el disfrute de haber sacado un Dorado o Llampuga de 9,300 Kgs. 







 


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