domingo, 25 de mayo de 2014

128 POR EL SARONICO

Esta primera etapa estuvo en tiempo de espera hasta mañana, que viene mis tres buenos amigos Menorquines. La derrota es dar la vuelta al Peloponeso y algunas islas del Ionico. Por supuesto ITAKA.
En este tiempo he navegado 134 millas. Y exceptuando la primera travesía que como ya conté fue un infierno, el resto se caracterizó por días muy bonancibles. Que me sirvieron para reglar los aparejos, terminar de montar artilugios, comprobar el buen funcionamiento de todo.
Y lo bien que funciona mi váter eléctrico. Ya no es necesario dar docenas de brazadas a la palanca. Ahora aprietas el botón y todo desaparece.
También la lavadora, otro buen artilugio y bien necesario.
Yo me cachondeaba de estos aparatos, pero ahora me doy cuenta de lo equivocado que estaba.
Por supuesto visitar a las amistades griegas. Explorar algún sitio que siempre lo dejas para otras ocasiones. Ir al supermercado y llenar el barco de víveres. En mi barco el vino y otras virtudes se consideran víveres.
Cuatro días los dediqué a acompañar a otro barco español, CARIÑO.
En esta pequeña espera, mi mecánico Spiros, me ha solucionado una pequeñita fuga de aceite, nada un manguito con un poro. Poner dos baterías nuevas para el motor.
Pica128

1 comentario:

Captain Teach dijo...

Ahora a tener cuidado de no comer jamón, que las fibras del tocino se enredan en la helice y...
Además es mentira que toque la loteria